Resistirse a soltar es vivir en deuda

Abril 14 de 2022.

Hay deudas económicas y deudas emocionales. Las dos con los mismos efectos: nos encadenan energéticamente. En toda deuda emocional le cedes tu energía vital a la persona a la que le cobras su deuda contigo. Tienes pesadillas, fantaseas reclamándole, gastas horas del día suponiendo qué será de su vida. Aparece esa necesidad de rastrear sus redes sociales.

¿Lo sientes?

Pones todo tu ser (cuerpo, mente y espíritu) al servicio del deseo a veces obsesivo de que esa persona te pague lo que te debe. Si no lo sientes tan claro, tu cuerpo sí. Estás rígida, irritable, tienes rabia e insomnio. También lo perciben tu emoción y tus pensamientos. Es tanta tu atención a la deuda, que la fatiga emocional no te deja centrarte en tus proyectos, ni desarrollar planes o cumplir sueños personales.

En estas deudas acumulas rabia por la persona y el efecto adicional es que encarcelas tu corazón a veces por años en una sola historia. Así no hay forma de manifestar amor, dinero, creatividad. Desperdicias tu luz interna y por esto te sientes incompleta y crees que lo único que te volvería a completar es recibir un pago por tus emociones golpeadas y tu tiempo perdido.

Pasa, por ejemplo, con ex-parejas que no se pueden soltar. En esa necesidad de sentirte completa tu creencia interna es «si te dejo ir tú ganas y yo pierdo». Claramente, también pierdes tú la energía creativa del amor se queda volando en el limbo de esa historia sin norte y sin propósito.

Sorprende ver cómo el flujo de la abundancia de la vida cambia el día que le dices a la otra persona desde tu corazón: “NO ME DEBES NADA». (sean tus padres, tu ex-pareja, tu ex-jefe, o familiares). Tus proyectos se activan porque tienes tiempo y fuerza para atenderlos. Reconoces mejores parejas porque dejas de mirar al que te debe. Empiezas a ser tú propio padre y tu propia madre. Manifiestas riqueza.

Para que tus procesos de soltar no dependan de la decisión del otro motívate mirando todo lo que tienes detenido en tu vida por esperar ese pago: amigos, relaciones, otro trabajo, proyectos, viajes y avanza hacia ellos por ti y solo por ti.

Incluso si ese otro quiere reparar algún daño, que tu acto de soltar nazca desde ti y recibirás esa reparación desde la abundancia y no desde la revancha.

¿Para qué soltar una historia?

  • Para que la rabia acumulada no nos limite a crear.
  • Para manifestar prosperidad.
  • Para volver a nuestra sensación de completud.
  • Para que nuestra energía y atención prestadas vuelvan en forma de grandeza, amor sano, salud, riqueza emocional y financiera.

Cada año trabajamos el encuentro «Soltar y Transformar» en los círculos de mujeres. https://www.eventbrite.com/e/circulo-de-merecimiento-en-espanol-tickets-64703430703?aff=erelexpmlt

Diana Carolina González-Sánchez

Arte: Tomada de internet.

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