3 de febrero, 2022
No me gusta trabajar en la autoestima. El problema de «subir la autoestima» es que nos acostumbramos a validarnos desde el elogio y la felicitación. Aprendemos que somos valiosas solo en los momentos de éxito cuando las criticas son buenas o en situaciones en las que el mundo nos dice que somos lindas, buenas, brillantes, cuando todo nos sale bien. ¿Y cuando no? cuando erramos, enfermamos, perdemos, ¿cuando no nos eligen? Se nos derrumba la casa.
Empieza el autorechazo. Empieza esta cacería interna horrible del error y el defecto culpable de que el mundo nos desapruebe. Para que el amor propio surja como el fenix tenemos que hablar de subir la autocompasión. La autocompasión entra donde la autoestima nos decepciona cada vez que se nos cae la casa de los elogios externos. La autocompasión nos dice que si las cosas no salieron como esperábamos lo que más importa es la respuesta que me doy a mi misma, el apoyo con el que me autosostengo, la ternura con la cual puedo sostener la mirada desaprobatoria del mundo.
La compasión no es lástima, es ausencia de crítica severa y de autorechazo. Es contemplación de lo que nos ha pasado. Al contrario de ignorar nuestros defectos y de culpar al mundo, (un poco lo que hace la autoestima) la autocompasión le da oxigeno a eso que no salió como esperábamos. Nos inclinamos a aquello que tanto rechazamos de nuestro cuerpo. Nos rendimos ante el síntoma físico que nos hace sufrir. Hacemos una tregua con las ideas de perfeccionismo. Comprendemos qué algo salió mal y nos enfocamos en buscar soluciones.
🌷 PRÁCTICAS DE AUTOCOMPASIÓN:
– Mírate con humanidad en las buenas y en las malas.
– Evita que tu primera opción para subir tu autoestima sea buscar algo o alguien externo que te valide.
– Evita odiar tus «fracasos».
– NO agregues más exigencia y crítica a lo que te salió «mal»
OM MANI PADME HUM
Les comparto este hermoso mantra para cultivar la autocompasión. Remite a los seis pāramitās (virtudes trascendentales) Es realmente milagroso.
https://www.youtube.com/watch?v=DpErvDc73AQ
Om, desarrolla la generosidad; Ma, la ética; Ni, la paciencia; Pad, la perseverancia; Me, la meditación; y Hum, la sabiduría.
Diana
Imagen: Billie Bond, Breathe, bronze, 2019
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